Lautaro Martínez sigue de racha. En República Checa, el delantero bahiense marcó un golazo para el triunfo por 1-0 de Inter de Milán sobre Sparta Praga y lleva tres goles en los últimos tres partidos del equipo italiano (en el empate 2-2 ante Bologna y el triunfo 3-1 sobre Empoli). El conjunto de Simone Inzaghi quedó a un paso de asegurar su clasificación a los octavos de final de la Champions League.
El Toro volvió a ser decisivo con el Inter de Milán y marcó este miércoles el gol de la victoria en Praga, un tanto fundamental que encarriló el pase Nerazzurro a los octavos de final y que dejó sin opciones a los checos, ya eliminados. El Inter quedó muy cerca de conseguir el pase directo a los octavos. El mejor equipo italiano, finalista hace dos temporadas y actual campeón de la Serie A, tiene en su capitán a la figura decisiva en los momentos claves. Porque en Praga, el Sparta se convirtió en un hueso duro que, de no ser por una genialidad de Lautaro, podría haber sacado el empate.
Dejar espacio a Lautaro tiene sus consecuencias. Bien lo saben en Italia, donde acabó como máximo goleador la pasada campaña y donde suma dos goles consecutivos en las últimas dos jornadas. Y bien lo pudo comprobar el Sparta en sus carnes. Está en su pico -hasta ahora- de la temporada, en la que ha dejado atrás esos momentos de duda por los que transitó al inicio.
Doce minutos tardó el Toro en desbloquear el choque. Cuando Bastoni levantó la cabeza desde el perfil zurdo en busca de un rematador, Lautaro atacó el segundo palo. Se liberó de su marca y el balón fue directo a su zona. Algo largo, en realidad. Pero el argentino tiró de oficio para sacarse una volea que rozó lo acrobático para fusilar a Vindahl, arquero del Sparta.
Más allá de lo estético, el tanto supuso un hito, pues elevó a Lautaro a lo más alto del ranking de goleadores del Inter en Champions, empatado en 14 gritos con el brasileño Adriano.
El control del Inter a partir del gol fue total. No corrió riesgos y el Sparta apenas dio a trabajo a Sommer, muy tranquilo bajo palos. Pudo aumentar la ventaja el combinado de Simone Inzaghi en la primera mitad, pero en la única clara para conseguirlo, Asllani definió demasiado arriba.
Continuó el monólogo en el segundo acto. El Inter dominó sin complicaciones, pero fue incapaz de hacer tanto daño como acostumbra, cercado por el buen entramado del combinado checo, que resistió ante los italianos. Sólo en una ocasión aprovechó el descuido de los locales, obligados a salir en busca del empate.
En esas apareció un hombre clave esta temporada, tan inesperado como efectivo, para poner el 0-2. Dumfries, desde el carril derecho, desatado, fulminó una contra marca de la casa en el Inter que arruinó un ligero fuera de juego de Dimarco en la jugada. El gol quedó anulado tras revisión en el VAR.
El Inter roza ya los octavos tras una gran primera fase: sólo le marcaron un gol en 7 jornadas. Falta un punto para certificar el merecido pase. Lautaro lo dejó a tiro.