El Talar, que hace algunas semanas celebró el título del Torneo Apertura de la Liga Femenina de Básquetbol, denunció un hecho de acoso que sufrió su equipo femenino durante una visita al Club Náutico Sportivo Avellaneda de Rosario. Mientras se bañaban y se cambiaban en el vestuario del club santafesino, al que habían llegado para disputar un partido, las jugadoras del conjunto porteño vieron que alguien las estaba filmando o sacándoles fotos con un celular. Inmediatamente le contaron lo sucedido a su cuerpo técnico, que realizó una denuncia correspondiente ante la justicia y decidió no presentarse a disputar el encuentro.
«Esta mañana viajamos para jugar la tercera fecha contra el equipo Náutico Avellaneda de la ciudad de Rosario. Apenas arribamos al club fuimos a entrenar, al terminar fuimos a almorzar y luego todas juntas nos dirigimos a los vestuarios dispuestos por el club», informó El Talar en un comunicado divulgado en las redes sociales.
«Después de unos minutos de ingresar al vestuario, mientras algunas nos estábamos bañando y otras esperaban para hacerlo, vimos un brazo que sostenía un celular negro por arriba de la pared que divide el vestuario de hombres con el de mujeres; el mismo apuntaba a las duchas y los cambiadores, donde nos encontrábamos las 12 jugadoras», continuó el texto.
Las autoridades del Náutico pusieron a disposición la filmación de las cámaras de seguridad del predio para intentar identificar al culpable, en las que se pudo ver a «un masculino en actitud sospechosa que entraba y salía del vestuario». El club habría identificado luego a esa persona -un menor de unos 15 años, según aseguró el presidente Pablo Creolani-, que sería socio de la institución y el responsable de tomar las imágenes de las jugadoras.
«Repudiamos enérgicamente lo sucedido, por lo cual las jugadoras acompañadas de nuestro staff, decidimos no presentarnos a jugar el partido correspondiente a la fecha donde oficiábamos de visitantes, por considerar un hecho intolerante que viola la privacidad de cada una de las integrantes de este plantel. Por nosotras, por todos los equipos femeninos sin distinción de deportes y por aquellas mujeres que atravesamos situaciones similares, esto no puede ni debe normalizarse», cerró el comunicado del equipo porteño, que resaltó «el rápido accionar del club local poniéndose a disposición a raíz de lo ocurrido».
Las jugadoras de El Talar no se quedaron calladas ante el momento angustiante que les tocó vivir.
«Estamos en el Siglo XXI y siguen ocurriendo estos hechos salvajes y cavernícolas de los cuales las mujeres somos las víctimas. Repudio lo que sucedió el día de hoy, que esta gente de mierda se pasee con impunidad y se crea con el derecho de fotografiarnos y grabarnos como si nada», escribió Natassja Kolff en sus redes.
En charla con Canal 3 de Rosario, la capitana Rocío Cejas afirmó: «En el momento estábamos super impactadas. No supimos reaccionar de inmediato en esa situación espantosa. Una de las chicas lo vió, nos lo comunicó a todas. Y las que ya estaban listas, fueron a ver si veían a alguien en los pasillos, pero no vieron a nadie. Después lo comunicaron a nuestros dirigentes y al cuerpo técnico y ellos enseguida fueron a hablar con los dirigentes del Club Náutico».
«En las cámaras pudieron encontrar a un menor con una actitud sospechosa entrando y saliendo del vestuario. Eso no confirma que haya sido esa persona, hay que investigar. Se debería conseguir el celular que vimos. No tengo la información de si fue video, si fue fotos, si llegó a grabar algo…», agregó.
Cejas contó que no es la primera vez que se alojan en los dormitorios del Náutico cuando van a jugar un partido allí. Ya lo habían hecho la temporada pasada y nunca antes habían tenido problemas. «Tras los entrenamientos, nos fuimos a bañar en los baños de los dormis. Estábamos todas en el vestuario, cambiándonos, y de repente vemos una mano por arriba de una pared que conectaba hacia otro vestuario que era de hombre, tenía un celular», dijo.
«Fuimos a jugar un partido de básquetbol y terminamos pasando una situación horrible, angustiante. El equipo está conformado por chicas de 17, 18, 20 años… la más grande no tiene ni 30. Somos chicas chicas y no podemos permitir esto. Hay cosas que no se deben normalizar», reflexionó.
«Nosotros tenemos que intentar hacer visible lo que pasó, para que los clubes y la Asociación puedan mejorar las condiciones en las que se juega la Liga. Que los clubes tengan condiciones realmente de profesionalismo, a la altura de lo que es el torneo», agregó Cejas.
Y cerró: «Nuestra privacidad fue vulnerada. El vestuario tiene una pared que no está pegada al techo y hay cierta comunicación con el vestuario femenino y masculino. Esa persona con el celular en la mano seguro se subió a alguna silla o mesa y nos filmó. Es una situación peligrosa que no debería pasar y pasó. Por suerte nos escucharon y le dieron la importancia que debía tener el asunto».
La jugadora aseguró que el equipo no está pensando ahora en si van a perder o no los puntos por no presentarse a jugar el partido. «Nadie nos hizo ningún tipo de problema cuando decidimos no jugar el partido. Todavía no sabemos si los puntos los perdemos o no, esa es una decisión de la Liga. Pero no estábamos con la cabeza puesta para jugar, no queríamos jugarlo de esa manera y en esas condiciones», aseguró.
Varios medios rosarinos señalaron que no es la primera vez que el Náutico queda envuelto en un escándalo. En 2021, Creolani, su presidente, fue denunciado por violencia verbal, de género y despido arbitrario por una profesora de zumba, que afirmó que el dirigente «entró en una de sus clases a los gritos, la maltrató y la insultó frente a todos los presentes». En aquella ocasión la jueza a cargo del caso, Patricia Otegui, falló a favor de la demandante y obligó al club a instrumentar “un protocolo de capacitación en la temática de género y violencia contra las mujeres”.
Las palabras del Náutico y la Liga
El Club Náutico también se sumó al repudio por lo ocurrido con las jugadoras del conjunto porteño y lamentó «profundamente el inaceptable incidente denunciado2.
El comunicado del Club Náutico. Foto @cnsabasquet«Como institución, nos podemos a disposición de las personas afectadas, así como de las autoridades correspondientes, para colaborar en todo lo necesario y asegurar que se esclarezca esta situación», afirmó el club rosarino.
«Estamos consternados, no nos esperábamos para nada esto. Pero lamentablemente acá estamos. Nos encontramos con un hecho totalmente desagradable y fortuito, que repudiamos. Supuestamente un menor que tomó imágenes en el vestuario de las chicas. Ahora pusimos todo el material de cámara a disposición para poder identificar a las supuestas personas que entraron en ese horario al vestuario y ver si podemos seguir con la investigación», le dijo Creolani al Canal 3.
«Las imágenes que tenemos son desde el ingreso al club y del pasillo que entra a los vestuarios. Estaría identificada la persona. Sería un menor de unos 15 años más o menos. Estamos tratando de comunicarnos con el teléfono que tenemos de ese socio para tener una charla con él y los padres y ver cómo seguimos. Cuando hablamos con los dirigentes del Talar les dijimos que hicieran la denuncia. Ahora estamos esperando que nos comuniquen de la denuncia, mientras juntamos toda la información que podemos para tenerla disponible cuando la soliciten. Veremos de qué manera avanza la parte legar, desde el club estamos a disposición para lo que sea necesario», continuó.
El comunicado de la Liga Femenina. Foto @laligafemenina_argLa Liga Femenina de Básquetbol, a través de la Asociación de Clubes, también se sumó al rechazo de lo ocurrido.
«En virtud de la no presentación de El Talar para la disputa de su partido ante Club Náutico Sportivo Avellaneda en Rosario, la AdC repudia completamente el aberrante hecho vivido por las jugadoras visitantes y se solidariza con ellas; y valora el rápido accionar del club local poniéndose a disposición a raíz de lo ocurrido. Acompañaremos a las jugadoras y a la investigación de la justicia rosarina hasta las últimas consecuencias», afirmó en un comunicado.
