El Seis Naciones acaba de comenzar y no sólo entregó un partidazo, sino que también una especie de final anticipada en Dublín. Y allí la mejor versión de Irlanda tuvo que aparecer en el segundo tiempo para remontar el marcador ante una intensa Inglaterra e imponerse por 27-22 a su eterna rival, que pudo sumar el bonus defensivo gracias a sus dos tries en los últimos minutos.
El XV del Trébol salió vivo tras un mal primer tiempo de esta jornada inaugural y con las opciones intactas de convertirse en el único equipo que enhebra tres títulos consecutivos desde que el Seis Naciones empezó a disputarse en el formato actual con la entrada de Italia hace ya 25 años. Los locales, además, se hicieron con el bonus ofensivo al lograr más de cuatro tries.
Inglaterra sorprendió con un tempranero try de Cadan Murley que descolocó a su oponente. Irlanda, dirigida por el joven Sam Prendergast, que sumó su primera titularidad en el Seis Naciones, se situó enseguida en la yarda 22 rival, pero, a pesar de las indisciplinas de los jugadores blancos, no consiguió que su dominio se reflejara en el marcador del Aviva dublinés.
Incluso los locales vieron cómo les era anulado un try de Ronan Kelleher en el minuto 16 porque una mano irlandesa había impedido que Itoje pudiera moverse para, al menos, intentar evitar el apoyo del atacante local.
Irlanda tampoco hacía valer su superioridad tras la expulsión de 10 minutos del apertura Marcus Smith mediada la primera parte. No fue hasta que James Lowe desbordó a la defensa inglesa por la banda izquierda para dejar solo a Jamison Gibson-Park que abrió el marcador local sin que Prendegast pudiera sumar los dos puntos de la conversión. La chapa decía 5-7 en el minuto 35.
Lo que parecía el inicio de la remontada irlandesa finalizó con un golpe de castigo en contra después de que el apertura Marcus Smith cruzara por debajo de los tres palos para que los blancos de la rosa en el pecho se fueran al vestuario con cinco puntos de ventaja (5-10) ante un sorprendido Aviva Stadium.
Si Murley había sido uno de los héroes ingleses en el comienzo del encuentro, a punto estuvo de ser el villano que propiciara el segundo try de los verdes en la reanudación al no controlar un balón sobre la línea de 22 propia que acabó en varios scrums, una pelea y ventajas de Irlanda, pero infructuosas a la hora de equilibrar el resultado.
Sin embargo, Prendergast, el público y en general todo el conjunto local empezó a hacerse con el control y a echar atrás a los británicos, que, poco a poco, desaparecían. Una jugada del joven apertura dio con Bundee Aki en superioridad en la esquina izquierda de su ataque para empatar a 10 en el 52. El propio Prendergast puso por primera vez por delante a los suyos al transformar un penal (13-10).
El seleccionador Simon Easterby, sustituto interino esta temporada del inglés Andy Farrell, dedicado a la preparación de la próxima gira de los Leones Británicos e Irlandeses, decidió darle písta a Jack Crowley por Prendergast en la dirección del XV del Trébol. Y le funcionó.
Secundado por un magnífico Gibson-Park y por la velocidad de James Lowe, los de Easterby pisaron en dos ocasiones el ingoal visitante de la mano de Tadhg Beirne, en el 64, y de Dan Sheehan, en el 72, para acabar con las esperanzas de Inglaterra a la que le quedaría solamente el consuelo de un postrero try de Tom Curry y de otro de Tommy Freeman ya en el tiempo agregado para, al menos, puntuar con el bonus defensivo.
El triunfo dejó a Irlanda compartiendo el primer lugar de la tabla con Francia y Escocia, pero parado en el tercer escalón por la diferencia de puntos desfavorable en comparación con los otros vencedores de la jornada. Mira a todos desde arriba Francia, que el viernes había aplastado a Gales por 43-0 y el segundo lugar es propiedad de Escocia que se hizo fuerte en Murrayfield y venció por 31-19 a la Italia que conduce el argentino Gonzalo Quesada, que peleó sin descanso hasta el final pero se fue con las manos vacías.
El rugby italiano continúa mostrando su avance y si bien este sábado cayó en Edimburgo, igualmente mostró que no será fácil de doblegar en 2025, igual que no lo fue la temporada pasada cuando evitó la Cuchara de Madera que «premia» al último de los seis equipos y que podría recaer de nuevo en Gales.
«La diferencia son los dos o tres tries recibidos con facilidad, que normalmente controlamos. En ataque no siempre ha funcionado todo, se nota que falta trabajo. La diferencia está ene l 19-19, tenemos que trabajar para no perder estos balones y quedar atrapados en el contraataque», comentó Quesada, al evaluar la derrota de los azzurri ante Escocia.
«Es una pena que la remontada haya sido excelente después de una primera parte en la que habíamos resistido. Ahora pensamos en Gales», añadió.
Escocia salió vencedor con dos tries de Huw Jones que cerraron el partido tras el el empate de Brex.
Italia siguió cerca del partido, incluso cuando Escocia jugó a un ritmo muy alto en la primera parte, sumando puntos en el marcador con Allan de penale incluso encontrando el empate en la segunda mitad. Al final, tras el descanso, el ataque de los azzurri mereció mejor suerte, al menos para conseguir el punto bonus.
La escuadra del Cardo cumplió con los pronósticos, pero tendrá que demostrar si ante equipos de mayor calidad puede ser una opción a las favoritas, Francia e Irlanda, para ganar el certamen. La respuesta llegará, probablemente, en la segunda jornada, cuando se cruce con Irlanda el 9 de febrero, también en Edimburgo.
