En una sorpresiva iniciativa que tendría un profundo impacto en Oriente Medio, Donald Trump dijo este martes que Estados Unidos tomará el control de la Franja de Gaza para reconstruirla, pero agregó que los palestinos que viven allí deberán ser “reubicados permanentemente” fuera de ese enclave devastado por la guerra. Declaró que sus habitantes “adorarían” irse de la Franja y vivir en otro lugar si tuvieran la opción.
El anuncio del presidente estadounidense sucedió luego de reunirse en la Casa Blanca con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu. En una conferencia de prensa conjunta, Trump dijo que «Estados Unidos tomará el control de la Franja de Gaza y también haremos un buen trabajo» en ella.
«La poseeremos y seremos responsables de desmantelar todas las peligrosas bombas sin explotar y otras armas que hay en este lugar». Según el republicano, Estados Unidos va a «nivelar el lugar y deshacerse de los edificios destruidos» para desarrollar económicamente el territorio. «Crear un desarrollo económico que proporcione un número ilimitado de empleos y viviendas para la gente de la zona», agregó. Haz un trabajo de verdad. Haz algo diferente.»
Sin dar demasiados detalles, dijo además que ve “una posesión a largo plazo”.
Durante su reunión, Trump y Netanyahu discutieron el frágil alto el fuego y la liberación de rehenes en el conflicto entre Israel y Hamas, que debe ingresar ahora en su segunda etapa que prevé el término de la guerra.
Netanyahu no dudó en elogiar a Trump y dijo que el presidente estadounidense es «el mejor amigo» que Israel ha tenido nunca en la Casa Blanca. Y que «su voluntad de pensar de manera innovadora con ideas nuevas nos ayudará a lograr todos estos objetivos», dijo Netanyahu sobre Trump, añadiendo que este último «ve un futuro diferente» para ese «trozo de tierra que ha sido el foco de tanto terrorismo».
Trump había generado recientemente controversia internacional al proponer “limpiar” Gaza y trasladar a sus habitantes a lugares “más seguros” como Egipto y Jordania, que enseguida se opusieron a la idea. “Cuando el presidente habla de ‘limpiarla’, habla de hacerla habitable”, comentó este martes el emisario especial de Trump para Oriente Medio, Steve Witkoff. Pero Witkoff considera “absurdo” decir que la Franja será habitable en cinco años. Un alto mando de Hamas, Sami Abu Zuhri, tachó las declaraciones de Trump de “receta para crear caos” en Oriente Medio.
“No creo que la gente deba regresar”, manifestó Trump con Netanyahu a su lado en el Salón Oval. “No se puede vivir en Gaza ahora. Creo que necesitamos otra ubicación. Creo que debería ser un lugar que haga feliz a la gente”.
Además, el mandatario y sus principales asesores alegaron que el cronograma para la reconstrucción del territorio palestino en los próximos tres a cinco años —tal como se estableció en el acuerdo de tregua temporal— no es viable. El magnate había pedido anteriormente a Egipto y Jordania que reciban a los palestinos de Gaza. Ambos países han rechazado rotundamente tal propuesta.
“Si se dan cuenta, a lo largo de las décadas, todo es muerte en Gaza”, comentó Trump. “Esto ha estado sucediendo durante años. Todo es muerte. Si podemos conseguir un lugar hermoso para reasentar a la población, permanentemente, en casas bonitas donde puedan ser felices y no se les dispare, ni se les asesine, ni se les apuñale para matarlos, como lo que está sucediendo en Gaza”, comentó.
El enfoque de la Casa Blanca sobre el futuro de los más de 2 millones de palestinos que viven en Gaza se dio a conocer mientras el alto al fuego entre Israel y Hamas pende de un hilo. Netanyahu enfrenta presiones tanto de su coalición de gobierno para terminar un alto el fuego temporal con los combatientes de Hamas como de los israelíes cansados de la guerra que desean que sus conciudadanos que aún están cautivos en Gaza regresen a casa y que el conflicto que comenzó hace 15 meses termine.
Trump y Netanyahu dijeron que sus conversaciones abarcarían un acuerdo de normalización entre Israel y Arabia Saudita, y preocupaciones compartidas sobre el plan nuclear de Irán, así como la segunda fase del acuerdo con Hamas.
Trump continúa presionando para reubicar a los palestinos de Gaza incluso después de que tanto el presidente egipcio Abdel Fattah el-Sissi como el rey jordano Abdullah II rechazaron públicamente la idea. Arabia Saudita, los Emiratos Árabes Unidos, Qatar, la Autoridad Palestina y la Liga Árabe también rechazaron planes para sacar a los palestinos de Gaza y Cisjordania, otro territorio palestino ocupado por Israel.
Sin embargo, Trump podría estar apostando a que puede persuadir a Egipto y Jordania para que acepten a los palestinos desplazados debido a la ayuda que Estados Unidos proporciona a El Cairo y Amán. Miembros de línea dura del gobierno de Netanyahu han respaldado el llamado a desplazar a los palestinos fuera de Gaza.
“Para mí, es injusto explicar a los palestinos que podrían regresar en cinco años”, dijo a periodistas el enviado de Trump para Oriente Medio, Steve Witkoff. “Es simplemente absurdo”.
El presidente estadounidense también señaló que podría estar reconsiderando un Estado palestino independiente como parte de una solución de dos Estados para el conflicto entre israelíes y palestinos que lleva décadas. “Bueno, muchos planes cambian con el tiempo”, dijo a los periodistas cuando se le preguntó si aún estaba comprometido con un plan como el que presentó en 2020 que llamaba a un Estado palestino.