El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, se mostró este domingo dispuesto a renunciar a su cargo si a cambio se le ofrece a Ucrania la entrada en la OTAN.
«Podemos intercambiar esto por la OTAN. Con estas condiciones, inmediatamente», dijo Zelenski al ser preguntado en una rueda de prensa celebrada en Kiev por las demandas del presidente de EEUU, Donald Trump, de que convoque elecciones.
Trump ha dejado claro que exigirá a Zelenski que convoque elecciones para poder firmar un acuerdo de paz con Rusia. Trump llegó incluso a llamar a Zelenski «dictador sin elecciones» por este motivo.
Zelenski terminó su mandato en mayo del año pasado, y sigue en el cargo sin ir a elecciones al prohibir la ley ucraniana que se celebren comicios en tiempo de guerra.
«Soy el presidente elegido legalmente no por la fuerza o porque tomé el poder; el 73 % votó por mí», dijo Zelenski recordando el porcentaje de votos que obtuvo en las elecciones que le llevaron al cargo, celebradas en 2019.
Además, Zelenski dijo que quería reunirse con su homólogo estadounidense, Donald Trump, antes de la posible cita entre este último y el dirigente ruso Vladimir Putin.
«Debemos reunirnos y hablar» del acuerdo sobre los minerales con Estados Unidos, aseguró Zelenski en una rueda de prensa en Kiev. «Creo que este encuentro debería ser justo, es decir [tener lugar] antes de que Trump se reúna con Putin», precisó.
Zelenski dijo también que Washington y Kiev están avanzando hacia un acuerdo sobre recursos minerales ucranianos, un asunto que se convirtió en un punto de discordia con Estados Unidos, aliado clave de Ucrania frente a Rusia.
Trump quiere que Ucrania otorgue a Estados Unidos un acceso prioritario para explotar los minerales del país, como compensación por decenas de miles de millones de dólares de ayuda entregada bajo el mandato de su predecesor Joe Biden.
«Estamos avanzando», consideró Zelenski en una rueda de prensa en Kiev, en la que explicó que funcionarios de ambas partes mantuvieron contactos sobre el acuerdo durante el día.
«No firmaré algo que pagarán diez generaciones de ucranianos», matizó sin embargo el dirigente.