Independiente le ganó 2-1 a San Lorenzo en el Nuevo Gasómetro y se sube a la punta del grupo B del Torneo Apertura de la Liga Profesional. Está en su mejor momento el equipo de Julio Vaccari, que se llevó un gran triunfo gracias al gol de Felipe Loyola a los 29 minutos del segundo tiempo. Sin embargo, una jugada pudo haber cambiado el desarrollo del clásico. Y fue, justamente, en el tanto del chileno que se genera la polémica.
Antes de que la pelota le caiga a Loyola, Santiago Hidalgo fue a buscar la pelota dentro del área tras un centro de Santiago Salle, el juvenil ingresado en el complemento, y claramente participó en la jugada más allá de que no tocó la pelota. En un primer golpe de vista, Hidalgo parece estar claramente en fuera de juego, aunque la perspectiva de la cámara puede jugar una mala pasada.
Ninguno de los jugadores del Cuervo reclamaron ante Nazareno Arasa y tampoco hubo una mención por parte del relator y comentarista de la transmisión hasta algunos minutos después de terminado el encuentro. ¿La jugada fue revisada en el VAR y, al ver que Hidalgo estaba habilitado, no llamaron al árbitro? ¿O fue que Lucas Novelli, el juez a cargo de la tecnología, no se percató del posible offside? Todavía queda en una incógnita.
Al ser una jugada tan fina, lo llamativo fue lo rápido que Arasa reanudó el juego. Esto avala la teoría de que, probablemente, Novelli y su asistente Laura Fortunato ni siquiera hayan identificado el posible fuera de juego y, por consiguiente, no trazaron las líneas.
Otro de los que no reclamó fue Miguel Ángel Russo, el DT del Ciclón. De todos modos, en conferencia de prensa se refirió a la jugada y fue tajante. «El fútbol es así. Hay un montón de cosas que mirar. El segundo gol de ellos es offside, es un fuera de juego bien evidente. Pero bueno, todo este tipo de cosas cuestan porque fue un partido parejo. Son dos equipos que vienen peleando arriba y es una lástima porque creo que pudimos haber merecido un poco más. Todo esto forma parte del juego y hay que superarse», dijo Miguelo.
Fue el clásico de las polémicas y del VAR. Las decisiones de Arasa no fueron las acertadas en primera instancia y por eso desde Ezeiza debieron trabajar bastante para corregir los malos fallos. Así y todo hubo lugar para varias polémicas en la victoria del Rojo de Avellaneda.
El árbitro había omitido la patada de Kevin Lomónaco sobre la cabeza de Alexis Cuello. La fue a ver al monitor y entendió que sí, era penal, luego anotado por Andrés Vombergar. Fue el 1-1 transitorio. Después sancionó la pena máxima por una supuesta falta de Jhohan Romaña sobre Lomónaco. No existió y después de repasarla por la pantalla corrigió su error.
Una más: hubo otro penal por una clara mano abierta de Romaña. Arasa no lo vio, pero sí la fue a revisar. Así y todo mantuvo su decisión de no cobrarlo. Polémico.