Cuando los futbolistas llegaron al vestuario, felices por el primer triunfo en la Liga Profesional, se encontraron con otro motivo para sonreír. Por fin, después de una larga pretemporada y la seguidilla de partidos que propuso la Copa Argentina y tres fechas del torneo Apertura en apenas una semana, el plantel tuvo franco. Sí, este lunes fue el primer día libre del año. Y no se trata solo de un premio por haber ganado el duelo ante Huracán. Es una decisión estratégica.
Es que se vienen 7 partidos en 21 días. Sí, uno cada 72 horas, con el desgaste físico y emocional que eso significa. Entre ellos, la clasificación a la siguiente fase de la Copa Libertadores, ni más ni menos. Por eso Gago resolvió que sus soldados pasen este lunes junto a sus familias. Los necesita para batallas importantes y un objetivo muy claro: llegar a la zona de grupos del máximo torneo continental.
La agenda está cargada, sin dudas. El primer paso será Racing, el próximo sábado a las 22.15 en Avellaneda. Un rival fuerte, una buena medida para un equipo que necesita afirmar los conceptos y evolucionar para llegar a su punto más alto en la competencia. El martes siguiente, recibirá a Independiente Rivadavia desde las 19.15. Luego, visitará a Banfield, el viernes 14 de febrero a las 20. Que abra la 6ª fecha no es casual: el martes 18 llegará su primer mano a mano por la fase 2 de la Libertadores y tendrá que viajar a Paraguay o a Perú.
El primer adversario de Boca en la Copa, saldrá de Nacional de Asunción o Alianza Lima, que se enfrentarán en la fase 1, empezando la serie este miércoles y resolviéndola el siguiente. Más adelante, si sigue con vida en la Libertadores, tendrá que jugar con el ganador de llave que disputarán Deportes Iquique de Chile e Independiente Santa Fe de Colombia.
A la vuelta de su periplo, recibirá a Aldosivi, el sábado 22 a las 19.15. Tres días después, el miércoles 25, jugará la revancha del primer repechaje con paraguayos o peruanos a las 21.30, y el viernes 28 volverá a ser local contra Rosario Central, desde las 20.
Hasta ahí, el cronograma estipulado que podría ser más apretado si todo sale como esperan Gago y compañía. Entre la semana del 6 al 13, siempre y cuando se clasifique a la fase 3 de la Copa, tendrá que jugar con chilenos o colombianos. Por las dudas, ya tiene programado el siguiente partido del Torneo Apertura para el viernes 7 de marzo a las 21.30. Será con Central Córdoba en Santiago del Estero.
En ese sentido, quizá sea posible entender los constantes cambios que hace Gago. Lo explicó el domingo en la conferencia de prensa, post victoria ante Huracán. “A los jugadores les repercute bien porque todos saben que tienen posibilidades de jugar y después, la decisión es mía», manifestó.
Luego, amplió: “Creo mucho en la competencia interna y es algo que se tiene que dar en cada partido. En mi carrera me pasó de enterarme una hora antes si iba a jugar o no y capaz que venía jugando y al otro partido, no me tocaba. Todos tienen que estar en condiciones de jugar. Voy a necesitar de todos y eso es lo bueno. Es un mensaje que di desde que llegué y luego, cuando arrancamos la pretemporada. Confío mucho en los jugadores que tenemos en el plantel. Después, me puedo equivocar o no en poner o sacar a alguien”.
Gago nunca utilizó la misma formación. El viejo axioma de Alfio Basile, “el equipo de memoria”, no es un lema para aquel volante que fue dirigido por el Coco en Boca. De los cuatro partidos que disputó en el año (Argentino de Monte Maíz, Argentinos Juniors, Unión y Huracán), el único que repitió fue Exequiel Zeballos.
El técnico dispuso de 20 jugadores para esa primera serie de 2025. Del debut en la Copa Argentina al duelo con el conjunto de La Paternal, metió 3 cambios. Para el siguiente choque con los santafesinos, ordenó 8 modificaciones. El domingo, contra el Globo, presentó 4 variantes, entre ellos Agustín Marchesín, que llegó para adueñarse del arco. Y habrá que ver qué equipo enfrenta a Racing.
“Ahora tenemos partidos el sábado, el martes y el viernes. Tenemos una seguidilla con partidos de mucho desgaste”, reflexionó Gago. Está claro que seguiría rotando, aunque probablemente sean pocos retoques contra la Academia. ¿Será que equipo que gana no se toca?