Se trata de Carlos Vagner Gularte Filho, conocido en este deporte como Ferrao, quien jugó hasta la pasada temporada en el Barcelona de España y fue fundamental para que Brasil conquiste su sexta estrella en 10 ediciones del Mundial de futsal, incluso con ese tanto en el que corrigió en el segundo palo un remate ante la marca del argentino Sebastián Corso.
Según la información publicada por el portal Sports24 de Kazajistán y confirmada por el medio español ‘Relevo’, el pivot, de 34 años, fue seleccionado de manera aleatoria por la Unidad Antidopaje de la FIFA para un control realizado en el hotel de concentración ubicado en Tashkent el viernes 4 de octubre, dos días antes de la final.
El actual jugador del Semey de Kazajistán, conocido como la ‘Pantera’ de la ciudad de Chapecó, entregó dos muestras como es el protocolo habitual y en la primera analizada se detectó la presencia de una cantidad no permitida de testosterona.
Eso, automáticamente, provocó una suspensión provisional para el futsalista, lo que ocurrió en diciembre pasado. Desde ese entonces, según reportaron los medios antes mencionados, Ferrao se fue con su familia de Kazajistán rumbo a Brasil y no ha retornado.
El jugador ejerció de inmediato su derecho a la contraprueba con la muestra B. El 20 de enero pasado, esa prueba también dio positiva por testosterona, una hormona que mejora la capacidad física de los atletas.
Ferrao tuvo problemas físicos durante todo el Mundial. Una lesión muscular justo antes del inicio del torneo hizo que actúe poco durante la fase de grupos y juegue con un vendaje sobre el aductor derecho. Apenas hizo un gol contra Tailandia, en el último encuentro del grupo B.
De hecho, después de convertir el 1-0 en la final del Mundial salió del campo de juego y no pudo volver a ingresar, pese a la importancia que tenía dentro del equipo dirigido por Marquinhos Xavier.
Ferrao contrató a dos equipos jurídicos especializados en este tipo de casos con el objetivo de evitar o suavizar la pena, que según el reglamento de la WADA sería de entre dos y cuatro años de suspensión. ¿El argumento? Al igual que el tenista italiano Jannik Sinner, número 1 del ranking mundial de la ATP, aseguran que se trata de una «clara contaminación».
El brasileño, tres veces elegido mejor jugador del mundo (2019, 2020 y 2021), tiene contrato con el Semey hasta 2028, donde llegó después de diez temporadas consecutivas en el Barcelona, donde se convirtió en el segundo máximo goleador de la historia, con 305 tantos.