Que el Superclásico no tape el bosque y la frase que se repite en River: “Ahora, hay que pasar el martes”

Desde las seis de la tarde del sábado, los grupos de WhatsApp riverplatenses explotaron con mensajes felices tras la victoria de River a Boca en el Bombonera. Palabras, fotos, videos, memes, inundaron los chats y las redes sociales. Pero cada uno de ellos finalizaba de manera cauta, con una frase que se repetía. “Ahora, hay que pasar el martes”, dicen los hinchas. Es lógico: la Libertadores es la obsesión. Y en Núñez quieren prolongar el festejo y cerrar la semana con fuegos artificiales.

Cuando River salga al campo de juego del Monumental este martes a las 21.30 para enfrentar a Colo-Colo por la vuelta de los cuartos de final de la Copa Libertadores pondrá mucho en juego. Disputará el pasaje a las semifinales del torneo continental y también una gran inversión, cuyo fin tiene el de estar el sábado 30 de noviembre en la cita final.

River ya recaudó (desde la fase de grupos) 7,6 millones de dólares por haber llegado a los cuartos de final y si pasa a las semis se asegurará 2,3 millones más. Y el campeón de la competencia embolsará otros 23 millones de dólares. Es decir que, de acá al final de la Copa, habrá en juego todavía más de 25 millones de la moneda estadounidense.

La institución de Núñez, a su vez, hizo una buena inversión en el mercado de pases -de alrededor de 20 millones de dólares- para reforzar al plantel, traer jerarquía y apostar por la Copa. Y para enderezar el rumbo futbolístico, concretó el regreso de Gallardo. El Muñeco no hace magia pero en menos de dos meses le dio vitalidad, espíritu y actitud al equipo, que de a poco va incorporando y asimilando sus conceptos.

El hombre de la estatua se bajó del bronce y, con el tren andando, se subió y asumió los riesgos por su sentido de pertenencia, su felicidad de estar en Núñez y el desafío de ir por más gloria. Y no tuvo problemas en comprometerse a que todo lo que sucediera en la cancha desde el momento en que llegó es su responsabilidad, tal como lo manifestó en una conferencia de prensa. Tiene espaldas y se banca la presión.

Entonces, ahora, vuelve a estar bajo otra situación morbosa tal como sucedió ante Talleres de Córdoba en los octavos de final, donde muchos se preguntaban qué pasaría si River se quedaba afuera de la Copa.

“Había cierto morbo de qué iba a pasar, todo lo que se iba a decir si quedábamos afuera, adónde íbamos a ir, no voy a ser hipócrita. Fue importante pasar para seguir construyendo. Intentaremos construir el mejor equipo posible para la Copa y el torneo», afirmó en aquel momento cuando su segundo ciclo apenas llevaba un par de semanas.

Ahora, tiene más tiempo de trabajo pero la situación es la misma. Muchos se preguntaran: ¿y qué pasa si no se clasifica? Es que esa situación sería un golpe en lo anímico y también en lo deportivo, dado que solo le quedaría por delante la Liga Profesional, en la que todavía está a varios puntos del líder Vélez. Y necesitaría o ser campeón o quedar entre los tres primeros en la tabla anual, en la que por ahora marcha segundo, para clasificarse a la Copa Libertadores 2025. El Mundial de Clubes, otro gran incentivo, todavía está lejos ya que se desarrollará a mediados del año que viene.

De todos modos, Gallardo no piensa más allá del partido con Colo-Colo, en el que buscará alcanzar otra semifinal de Copa. Y a la vez es cauto. “Decir que en un mes y medio todo puede cambiar es mentir; en este tiempo, en las semanas que tuvimos, seguimos intentado llevar alguna idea, que a veces sale y a veces no”, reconoció. A su vez, planifica al detalle cada partido. Y así como buscó la mejor estrategia ante Boca, aun jugando con suplentes, y cuidó piernas de los titulares para administrar cargas.

Ahora, con toda la energía, su equipo se dispone a afrontar una nueva batalla ante el conjunto chileno, que, dirigido por Jorge Almirón, y con Arturo Vidal como emblema, buscará plantarse en un Monumental que estará colmado de hinchas de River, ya que no habrá hinchas visitantes. Y seguramente apostará a robustecer el medio con el propio Vidal y el colorado Gil y a los contragolpes con la perspicacia de Palacios y la presencia de Correa.

Por su parte, River intentará ser protagonista desde el inicio, con un ataque sostenido y continuo, aunque sin enloquecerse. Sabe Gallardo que en el mediocampo estará la calve y la idea es tener movilidad, precisión y rapidez para saltear rápido los obstáculos y no entorpecerse en la lucha. Aunque, claro, también estará preparado para combatir. Espera por Maxi Meza, quien está mejor de la lesión y por las dudas tiene en las gateras a Colidio y Lanzini, de grandes actuaciones en la Bombonera.

River lega estimulado a la contienda copera, la de más trascendencia. “El gran objetivo nuestro está puesto en el martes”, afirmó Gallardo, a tono con esos hinchas que, después del festejo por el triunfo a Boca, se enfocan en el deseo de seguir en la Copa y extender la algarabía de las últimas horas.