MONTEVIDEO.- Este 1° de marzo, Uruguay empieza un nuevo gobierno de la mano de Yamandú Orsi, el profesor y heredero del legado político de José “Pepe” Mujica. Un día antes de la asunción, el presidente electo atiende una apretada agenda en el exterior y se ultiman los detalles de la ceremonia de traspaso de poder con la que el mandatario saliente de centroderecha, Luis Lacalle Pou, dice adiós.
El nuevo presidente, de 57 años, fue docente de historia y cuenta con una década de experiencia en la intendencia del departamento de Canelones, el segundo más grande del país. Su llegada a la presidencia marca el regreso al poder del Frente Amplio (FA), que gobernó entre 2005 y 2020, con Mujica y Tabaré Vázquez.
La ceremonia presidencial comenzará en el Palacio Legislativo luego del mediodía y está previsto que sobre las 13 lleguen los invitados.
Los presidentes de Brasil, Bolivia, Chile, Colombia, Guatemala, Honduras, Panamá, Paraguay y República Dominicana, así como el rey de España, asistirán al juramento en Montevideo.
Por su parte, el presidente argentino Javier Milei no acudirá al evento, según fuentes de LA NACION, para preparar un discurso que pronunciará ante la Asamblea Legislativa a las 21 del mismo sábado.
Por su parte, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, sí acudirá a la juramentación y, además, aprovechará su viaje a Montevideo para participar en un panel que reunirá a diversas figuras políticas de América Latina, incluidas el presidente de Chile, Gabriel Boric; la vicepresidenta de Colombia, Francia Márquez; la presidenta del PT de Brasil, Gleisi Hoffmann; la candidata a la Presidencia de Ecuador, Luisa González y el titular del Frente Amplio, Fernando Pereira.
La organización oficial cambió el lugar del acto de asunción, que tradicionalmente se lleva a cabo en la céntrica Plaza Independencia, pero el pronóstico de lluvias obligó a trasladar la jura al Auditorio Adela Reta del Sodre.
Se espera que sobre las 14 tanto Orsi como la vicepresidenta electa, Carolina Cosse, presenten juramento ante la Asamblea General. Luego, un vehículo eléctrico los llevará hasta el auditorio y se espera que en ese trayecto los simpatizantes del FA y otros ciudadanos saluden a la fórmula presidencial.
La toma de mando oficial será alrededor de las 16.30, cuando Orsi reciba la banda presidencial de manos de Luis Lacalle Pou. La pieza fue bordada por la costurera Luján Soria con hilo cubierto en oro de 24 quilates que la Cancillería del país suramericano llevó desde España, según publicó el diario El País.
Si el clima lo permite, en la Plaza Independencia podría haber un espectáculo artístico y un saludo público de Orsi, como puntapié inicial del nuevo gobierno. En ese punto hay un escenario instalado desde hace varios días para usarse en caso de que el tiempo lo permita.
El presidente electo recibirá a varias de las delegaciones que llegaron a Montevideo un día antes de la ceremonia de cambio de mando. Orsi se juntará con representantes de Estados Unidos, República Dominicana, Corea, Japón y en todas las reuniones bilaterales estará acompañado por el canciller designado para el nuevo gobierno, Mario Lubetkin.
Orsi -que gobernará hasta 2030– también se reunirá con la comitiva española que estará encabezada por el rey Felipe VI y con una delegación de Estados Unidos encabezada por la senadora Katie Britt. Más tarde se reunirá con el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro.
En tanto, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, organizó una cena para esta noche en la residencia del embajador brasileño en Montevideo, José Passarini, a la que están invitados Orsi, Gabriel Boric y Gustavo Petro. El sábado por la mañana, tiene previsto reunirse con Mujica en el Hotel Sofitel de la capital uruguaya.
El domingo, luego de la asunción, Lula prevé mantener una primera reunión formal con Orsi como presidente en el Palacio Estévez a las 16.30, aunque ya tuvieron encuentros previos, incluso con Mujica.
En una de sus últimas declaraciones como presidente en funciones, Luis Lacalle Pou, se refirió al ocaso de su gobierno y dio un balance que consideró positivo de su gestión al frente de el país que fue calificado como la única democracia plena de América del Sur por un reciente informe de The Economist.
“Parte del orgullo de hacer las cosas bien es generar confianza, merecerla y cumplir”, señaló el presidente durante una entrega de obras de reformas a una ruta en la ciudad uruguaya de Treinta y Tres.
El mandatario saliente también habló de la importancia del respeto y la tolerancia para las discusiones sanas: “Se está perdiendo la moda de discutir. Yo quiero una sociedad que discuta, quiero una sociedad que intercambie. Quiero que alguien se pueda preguntar si lo que dice está bien y tiene argumento para defenderlo. O resulta que ahora la discusión es pelea o es insulto. Yo quiero una sociedad que discuta de política y de fútbol también”.
La economía cayó más del 7% en el primer año por la pandemia; creció 5,6% en 2021 y 4,7% en 2022; sufrió la gran sequía y el desfasaje cambiario con la Argentina en 2023, y un aumento del PBI de 0,4% .
“Nunca pusimos nada de excusa, ni pandemia, ni sequía, ni nada que se le parezca. Y ese enorme cumplimiento de los compromisos hace que esa persona que depositó su esperanza le cumplimos”, sostuvo.
Hoy participará de un acto de celebración patria vinculado con la revolución de 1810-1811, inaugurará más obras y se preparará para el acto de mañana cuando dejará de ser presidente.
Lacalle Pou (Partido Nacional), de 51 años, no podía ser reelegido y su candidato Álvaro Delgado perdió en el balotaje de noviembre ante el opositor Orsi. Podrá volver a postularse en 2029.
Con información del diario El País (Uruguay)