El Senado aprobó este jueves a Robert Kennedy Jr. como secretario de Salud de Estados Unidos, a pesar de la oposición de los demócratas y de los científicos que denuncian en particular sus posiciones antivacunas.
El sobrino del presidente asesinado John F. Kennedy ha conseguido los 51 votos necesarios para la confirmación, convirtiéndose en la última incorporación polémica al gabinete del presidente Donald Trump.
A sus 71 años, «RFK Jr.» debe ponerse al frente de un departamento que emplea a más de 80.000 personas.
Su lema: «Devolver la salud a Estados Unidos», un calco de la consigna trumpista «Haz que Estados Unidos vuelva a ser grande otra vez».
El anuncio de su nombramiento indignó a muchos congresistas demócratas debido, en particular, a su apoyo a teorías conspiracionistas, como la que vincula la vacunación con el autismo.
Sin embargo, es aclamado por personalidades de ambos espectros políticos por su lucha contra la comida chatarra y el poder de los grupos farmacéuticos.
Este antiguo demócrata y abogado en derecho ambiental se alineó con Donald Trump durante la última campaña presidencial después de haber sido candidato independiente.
«Hace 20 años, el autismo en los niños era de 1 por 10.000. AHORA ES 1 DE CADA 34. íGUAU! Algo funciona realmente mal. íNecesitamos a Bobby!!!», escribió Donald Trump en su plataforma Truth Social, utilizando el diminutivo de Robert.
En los últimos años, Robert Kennedy Jr también ha elogiado los supuestos beneficios de la leche no pasteurizada, una tendencia de consumo en Estados Unidos temida por las agencias sanitarias, especialmente desde que numerosos bovinos fueron contaminados por la gripe aviar.
Kennedy Jr., de 71 años, es hijo del ex fiscal general de EE.UU. Robert F. Kennedy y sobrino del expresidente demócrata John F. Kennedy (JFK), ambos asesinados en la década de los sesenta, pero el clan de los Kennedy se ha desmarcado de él por su cercanía con Trump.
Antes de dar su apoyo al republicano, comenzó su fallida carrera a la Presidencia en el bando demócrata.
En abril de 2023 se presentó como la alternativa al entonces presidente, el demócrata Joe Biden (2021-2025), y anunció sus aspiraciones a ser el candidato de ese partido, pero en octubre de ese año dejó esa formación para postularse como independiente, algo que finalmente acabó suspendiendo y se sumó a la campaña de Trump.
Su elección como secretario de Salud fue cuestionada y se unió a la polémica lista con la que conformó su gabinete, como el dueño de X, Elon Musk, como responsable del Departamento de Eficiencia Gubernamental, el presentador de Fox News Pete Hegseth como jefe del Pentágono o el legislador Matt Gaetz como fiscal general. Este último renunció arrastrado por sus escándalos sexuales.
En su audiencia de confirmación en el Senado el pasado 29 de enero, Kennedy Jr. negó ser un antivacunas y se comprometió a no desincentivar su uso, pese a haber defendido en el pasado que ninguna es segura.
En concreto, dijo que apoya la administración de aquellas contra el sarampión y la polio: «No haré nada como secretario de Salud que dificulte o desanime a las personas a recibir cualquiera de esas vacunas», dijo.