WASHINGTON-. La red social X, propiedad de Elon Musk, llegó a un acuerdo para indemnizar al presidente norteamericano, Donald Trump, con unos 10 millones de dólares por el cierre de su cuenta en la entonces Twitter tras el controvertido asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021.
Así lo reveló este miércoles el diario The Wall Street Journal, que planteó también un posible conflicto de interés ya que Musk, el hombre más rico del mundo, forma parte del círculo de confianza del presidente en la Casa Blanca.
El bloqueo de la cuenta se produjo cuando Musk todavía no era el dueño de Twitter. Tras comprar la compañía, Musk ordenó reactivar el perfil de Trump en noviembre de 2022, aunque para entonces este había desarrollado en paralelo su propia red social, Truth Social.
Aunque Trump presentó una demanda contra Twitter que luego fue desestimada por un juez en primera instancia, el mandatario de Estados Unidos recurrió ante un tribunal superior y el caso continuó adelante pese a que Musk y Trump se ha mostrado cada vez más como aliados inseparables.
Los abogados de las dos partes registraron un escrito en los juzgados el pasado 20 de noviembre, señalando que había negociaciones para llegar a un acuerdo. Finalmente, cerraron el caso y la retirada del recurso fue aprobada por el juez el pasado lunes, según una resolución judicial conocida por The Wall Street Journal que no expone los detalles del acuerdo.
Según el medio de comunicación neoyorquino, los abogados de Trump se plantearon abandonar el recurso, dada la cercanía entre Musk y Trump y el hecho de que el multimillonario hubiera donado a su campaña presidencial más de 260 millones de dólares. Sin embargo, el pleito judicial siguió adelante.
Musk fue designado por Trump para liderar el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), que pretende llevar a cabo una reforma drástica de la Administración que incluye despidos a gran escala y reducción de los despachos estatales. Las actuaciones del multimillonario han hecho saltar las alarmas sobre los potenciales conflictos de intereses que conlleva su actuación, de la que podrían sacar grandes beneficios económicos las empresas que él posee.
Meta, propiedad del también multimillonario Mark Zuckerberg, acordó recientemente pagar 25 millones de dólares para resolver otra demanda presentada por Trump contra la compañía por la suspensión de sus cuentas en Facebook e Instagram tras el asalto al Capitolio.
De esa cantidad, 22 millones se destinarían a un fondo para una biblioteca presidencial de Trump, mientras que el resto servirá para cubrir los gastos legales y compensaciones a otras partes del caso. Hasta ahora no se conoce si el dinero que resulte de la demanda a X tenga el mismo destino.
Trump también demandó a Google por el cierre de su canal de YouTube, pero ese pleito legal aún no se ha resuelto.
En diciembre pasado la cadena de televisión ABC News y su presentador estrella, George Stephanopoulos, acordaron pagarle 15 millones de dólares a futura fundación y museo presidencial de Trump y un millón más para cubrir gastos legales, tras una demanda del entonces candidato presidencial a la cadena de televisión por una declaración del periodista que el ahora presidente consideró difamatoria.
El presentador dijo frente a cámaras que Trump “violó” a la escritora y excolumnista de la revista Elle E. Jean Carroll, en medio de un informe sobre la condena al republicano por su abuso sexual. Como el jurado encontró al entonces expresidente responsable de abuso sexual y no de violación, el entonces candidato presidencial republicano acusó a Stephanopoulos de dañar su reputación al haber repetido en varias ocasiones durante el programa que él había sido condenado a pagar una compensación por haber “violado” a la escritora.
El republicano también ha demandado a CBS News, filial de Paramount Global, por editar la entrevista que realizó a Kamala Harris durante la campaña de las presidenciales, alegando que era una forma de “interferencia electoral”.
Durante el primer mandato presidencial de Trump, Twitter era su herramienta de comunicación preferida. La usó el día del asalto al Capitolio para presionar a su vicepresidente, Mike Pence, para que no certificar la victoria de Joe Biden en las elecciones de 2020. Tras el controvertido asalto al Capitolio, Twitter decidió vetarle.
“Tras revisar detenidamente los recientes tuits de la cuenta @realDonaldTrump y el contexto que los rodea —específicamente cómo están siendo recibidos e interpretados dentro y fuera de Twitter— hemos suspendido permanentemente la cuenta debido al riesgo de que se produzca una mayor incitación a la violencia”, dijo tras la suspensión la red social. Y añadió: “En el contexto de los horribles acontecimientos de esta semana, dejamos claro el miércoles que las violaciones adicionales de las normas de Twitter podrían dar lugar a este mismo curso de acción. Nuestro marco de interés público existe para permitir que el público escuche directamente a los funcionarios elegidos y a los líderes mundiales. Se basa en el principio de que el pueblo tiene derecho a pedir cuentas al poder en público. Sin embargo, hace años que dejamos claro que estas cuentas no están por encima de nuestras normas por completo y que no pueden utilizar Twitter para incitar a la violencia, entre otras cosas. Seguiremos siendo transparentes en cuanto a nuestras políticas y su aplicación”, se leyó en un comunicado difundido por la entonces red social Twitter en 2020.
Diario El País y agencia AP