LIUBLIANA.- Eslovenia le prohibirá la entrada del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, citando la causa en su contra en la Corte Penal Internacional (CPI) por presuntos crímenes de guerra cometidos durante la ofensiva militar en Gaza, y en medio de una creciente presión europea sobre el premier.
La noticia se conoció mientras Netanyahu viajaba a Nueva York, donde se reunirá esta tarde con el presidente Javier Milei. Este viernes hablará frente a la Asamblea General de la ONU, donde se enfrentará a los líderes que en los últimos días se sumaron al reconocimiento del Estado palestino, y el lunes tendrá su cuarta reunión bilateral con el presidente norteamericano, Donald Trump.
“Condenaré a aquellos líderes que, en lugar de condenar a los asesinos, violadores y quemadores de niños, quieren darles un Estado en el corazón de Israel”, anticipó sobre su discurso antes de salir de Israel.
La decisión de Eslovenia de declarar a Netanyahu “persona non-grata” está vinculada a una orden de arresto emitida por la Corte Penal Internacional contra el primer ministro israelí, manifestó la funcionaria del Ministerio de Relaciones Exteriores, Neva Grašič, según la agencia oficial de noticias STA.
El país miembro de la Unión Europea, de aproximadamente dos millones de habitantes, que reconoció un Estado palestino el año pasado, ha sido una crítica vocal de las acciones israelíes en Gaza y la medida de este jueves contra Netanyahu aparentemente fue diseñada para subrayar las políticas del país.
Eslovenia ya había prohibido la entrada al país del ministro de Seguridad Nacional de Israel, Itamar Ben-Gvir, y del ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, e impuso un embargo de armas a Israel.
“Todos los países que están obligados por la corte internacional, incluida Eslovenia, no deben reconocer la situación resultante de la presencia ilegal de Israel en el territorio palestino ocupado, y no deben ofrecer ningún apoyo para mantener esta situación”, añadió Neva Grašič.
El gobierno esloveno indicó en X que la decisión envía “un mensaje claro al Estado de Israel de que Eslovenia espera un respeto consistente por las decisiones de los tribunales internacionales y el derecho humanitario internacional”.
Al hacerlo, Eslovenia “confirma su compromiso con el derecho internacional, los valores universales de los derechos humanos y una política exterior principista y consistente”, agregó el gobierno.
La decisión va en línea con la creciente presión de la Unión Europea, que la semana pasada propuso sanciones y aranceles contra Israel en respuesta a la guerra en Gaza. La Comisión Europea presentó un plan que incluye sanciones a ministros de Netanyahu y dirigentes de Hamas, y la revisión de parte del acuerdo de libre comercio.
En detalle, la Comisión Europea presentó una propuesta de sanciones parciales contra Israel con el objetivo de “detener el sufrimiento humano en Gaza” y no “castigar a su pueblo”, según explicó la jefa de la diplomacia de la UE, Kaja Kallas.
Las medidas, además de sanciones individuales a figuras clave del gobierno de Netanyahu, dirigentes de Hamas y colonos acusados de violencia en Cisjordania, incluyen congelación de activos, prohibición de viajes y pérdida de beneficios económicos en la UE.
También se plantea retirar las preferencias arancelarias a un 37% de las exportaciones israelíes, lo que encarecería productos agrícolas e industriales en unos 227 millones de euros anuales, aunque las ventas de armas quedarían fuera.
Paralelamente, Bruselas suspendió contratos y fondos bilaterales por más de 32 millones de euros, decisión que puede aplicar sin aval de los 27 Estados miembros.
La iniciativa se produce en medio de una fuerte presión internacionales y protestas en ciudades europeas contra la ofensiva israelí en Gaza en respuesta al ataque del grupo terrorista Hamas del 7 de octubre de 2023, que ya dejó unos 65.000 palestinos muertos según autoridades locales.
Para prosperar, las sanciones personales requieren unanimidad de los 27 países, mientras que los cambios comerciales pueden aprobarse por mayoría calificada, aunque la resistencia de Alemania y otros aliados de Israel amenaza con frenar el proceso.
Desde Jerusalén, el canciller Gideon Saar rechazó con dureza la propuesta y advirtió a la presidenta de la Comisión Europa, Ursula von der Leyen, que “la presión a través de sanciones no funcionará”, calificando la iniciativa de “moral y políticamente distorsionada”.
La UE, dividida desde el inicio de la guerra en octubre de 2023, enfrenta así un complejo debate interno entre quienes, como España, Irlanda y Bélgica, reclaman medidas más duras y aquellos, como Alemania y Hungría, que prefieren preservar la relación con Israel.
Agencias AP y AFP