BRUSELAS.- La definición del papa Francisco que caracterizó en general el rol de las mujeres como de “acogida fecunda, cuidado y entrega vital”, fue duramente cuestionada como “reduccionista” este sábado luego de una visita a la Universidad Católica francófona de Louvain-la-Neuve.
En su exposición en ese centro universitario, en el marco de su visita a Bélgica, Francisco afirmó que “la Iglesia es una mujer”. Y añadió que “lo que caracteriza a las mujeres, lo que es femenino, no está determinado por consensos ni ideologías”.
Desde su elección en 2013, el Papa amplió el espacio de las mujeres y aumentó su número en puestos de responsabilidad en la Curia, el gobierno central de la Santa Sede.
El intercambio de ideas de este sábado en Bélgica ocurrió a pocos días de la apertura en el Vaticano de la Asamblea General del Sínodo sobre el futuro de la Iglesia, un vasto proyecto del Papa que se centra en particular en el lugar de la mujer en la Iglesia.
Ya el viernes, el rector de la Universidad de Lovaina en Flandes, Luc Sels, había interrogado al Papa sobre “esta gran diferencia entre hombres y mujeres en la Iglesia”.
”¿No sería más cálida la Iglesia si se concediera un lugar más importante a las mujeres también en el sacerdocio?”, preguntó, en un cuestionamiento que el papa no respondió.
Francisco acudió a la universidad el sábado para celebrar su próximo 600° aniversario, en el marco de un viaje de fin de semana que está haciendo a Bélgica. En su discurso hizo un llamado a la acción mundial contra el cambio climático, pero también respondió a la carta que le enviaron estudiantes y profesores en la que le preguntaban por la doctrina de la Iglesia católica sobre la mujer. El Papa subrayó que la Iglesia no se dirige como una corporación. “Una mujer (…) es una hija, una hermana, una madre, igual que un hombre es un hijo, un hermano, un padre”, afirmó.
Fue luego de la visita del Papa a la universidad que profesores y estudiantes dieron a conocer un comunicado en el que dijeron que querían expresar su “incomprensión y desaprobación” por las opiniones del Pontífice. ”La Universidad Católica de Lovaina […] deplora las posiciones conservadoras expresadas por el papa Francisco sobre el papel de la mujer en la sociedad”, dice el texto en un lenguaje poco común de un centro educativo católico sobre un papa.
”La llamada al desarrollo integral nos parece incompatible con las posiciones sobre la homosexualidad y con el lugar de la mujer en la Iglesia católica”, señalaron.
“Estamos en shock”, dijo la estudiante Valentina Hendrix, de 22 años, para quien Francisco “nos reduce el rol de tener hijos, ser madres, esposas, todo aquello de lo que queremos emanciparnos”.
El climatólogo Jean-Pascal van Ypersele afirmó que Francisco “no estuvo a la altura de las circunstancias”.
”Responder que la Iglesia es una mujer es realmente evitar el nudo de la pregunta sobre el respeto de la Iglesia por las mujeres y su papel en la institución y en la sociedad”, comentó.
Durante la jornada, Francisco visitó la tumba del rey belga Balduino, fallecido en 1993 y quien se negó a firmar la ley que despenaliza el aborto en Bélgica.
En presencia del rey belga, Felipe, y de la reina Matilde, Francisco elogió el “coraje” del soberano que decidió “dejar su cargo de rey para no firmar una ley asesina”, según afirmó.
En 1990, opuesto a un proyecto de ley que despenalizaba el aborto, Balduino se declaró “incapacitado de reinar” durante varios días, mientras el Parlamento aprobaba el texto. Según el Vaticano, Francisco también invitó a los belgas a seguir el ejemplo del rey Balduino” y dijo esperar que la causa para su beatificación sea exitosa.
En la mañana, el Papa participó de un encuentro con religiosos en la gigantesca basílica del Sagrado Corazón, durante la que también fue cuestionado sobre los casos de violencia sexual en el ámbito de la Iglesia belga.
Mia De Schamphelaere, representante de centros de acogida para víctimas de violencia sexual en la región belga de Flandes (norte, de habla flamenca), preguntó directamente al pontífice sobre este controvertido asunto. ”¿Cómo puede la Iglesia ver, reconocer y aprender de las heridas de los sobrevivientes? ¿Cómo podemos construir una cultura eclesial en la que todos, jóvenes y mayores, hombres y mujeres, se sientan seguros y protegidos?”, preguntó.
En su respuesta, el papa enfatizó la importancia de escuchar “el sufrimiento de las víctimas”, para (…) “hacerles sentir nuestra cercanía y ofrecerles toda la ayuda posible, para aprender de ellos a ser una iglesia que sirve a todos sin dominar a nadie”.
”Una de las raíces de la violencia es el abuso de poder, cuando utilizamos los roles que tenemos para aplastar a otros o manipularlos”, acotó el pontífice.
En la tarde del viernes, Francisco había mantenido una reunión reservada, a puerta cerrada, con 17 víctimas de agresiones sexuales en la iglesia belga.
Su viaje a Bélgica finalizará el domingo con una misa en el estadio Rey Balduino, en Bruselas, donde se esperan unos 35.000 fieles.
Agencias AFP y Reuters
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