LOUISVILLE, Kentucky.- Por lo menos nueve personas murieron debido a las lluvias torrenciales que azotan diversas zonas de Estados Unidos, ocho de ellas en el estado de Kentucky, que fallecieron cuando los arroyos crecieron por las fuertes lluvias y las inundaciones en las rutas.
Además de las inundaciones en Kentucky, hubo deslizamientos de barro en California, fuertes nevadas en la costa este, alertas de tornado en Georgia y Florida, y advertencias por un nuevo azote del vórtice polar ártico, que ponen a distintos estados del país en alerta.
El gobernador de Kentucky, Andy Beshear, dijo que muchas de las muertes, incluida una madre y un niño de 7 años, fueron causadas por autos que quedaron atrapados en el agua.
“Esta es la fase de búsqueda y rescate, y estoy muy orgulloso de todos los habitantes de Kentucky que están respondiendo, arriesgando sus vidas”, señaló Beshear.
Los meteorólogos advierten que Estados Unidos está a punto de experimentar su décimo y más extremo evento de vórtice polar de esta temporada. Las condiciones climáticas del Ártico están empujando nuevamente el cúmulo de aire frío, que normalmente permanece cerca del Polo Norte, hacia Estados Unidos y Europa, provocando, una vez más, condiciones extremas para sus habitantes.
“Manténganse alejados de los caminos en este momento y manténganse con vida”, pidió el gobernador de Kentucky.
Partes de Kentucky y Tennessee recibieron hasta 15 centímetros de lluvia durante las tormentas del fin de semana, dijo Bob Oravec, pronosticador del Servicio Meteorológico Nacional.
Beshear detalló que las tormentas dejaron sin electricidad a unos 39.000 hogares, y advirtió que los fuertes vientos en algunas áreas podrían agudizar los apagones.
Al mismo tiempo, el gobernador aseguró que el presidente Donald Trump había aprobado su solicitud para financiar la ayuda en casos de desastre.
“Los efectos continuarán por un tiempo, habrá muchos ríos crecidos e inundaciones”, dijo Oravec el domingo. “Cada vez que hay una inundación, ésta puede durar mucho más que la lluvia”, añadió.
El agua sumergió autos y edificaciones en Kentucky, y deslizamientos de tierra bloquearon caminos en Virginia la noche del sábado y el domingo por la mañana. Las autoridades de ambos estados emitieron advertencias de inundaciones, al igual que las de Tennessee y Arkansas. El Servicio Nacional de Meteorología instó a la población a evitar conducir en el área.
El descenso de la temperatura, por otra parte, reemplazó las fuertes lluvias por nieve la madrugada del domingo en partes de Kentucky. El gobernador declaró de manera preventiva el estado de emergencia en el estado.
“Las inundaciones generalizadas continúan”, dijo Beshear en una publicación en las redes sociales el domingo por la mañana. Agregó que las evacuaciones de personas en las zonas inundadas continuaban el domingo.
El Centro Médico Kentucky River en la ciudad de Jackson anunció el cierre de su departamento de emergencias y transfirió a todos los pacientes a otros dos hospitales de la región.
Se pronostica que la bifurcación norte del río Kentucky alcanzará esta tarde un nuevo máximo, casi 4,3 metros por encima del nivel de inundación, de acuerdo con el servicio meteorológico.
Las fotos publicadas por autoridades y residentes en las redes sociales mostraban automóviles y edificios bajo el agua en el centro-sur y el este de Kentucky. En el condado Buchanan, Virginia, la policía resaltó que varios caminos quedaron bloqueados por deslizamientos de tierra.
La Agencia de Manejo de Emergencias del condado Simpson, en Kentucky, señaló que las autoridades realizaron varios rescates de vehículos atrapados en las inundaciones. “Quédense en casa si pueden”, pidió la agencia en Facebook.
Mientras tanto, se espera que una fuerte nevada cubra gran parte de Nueva Inglaterra, región del noreste de Estados Unidos que comprende los estados de Maine, Vermont, Nuevo Hampshire, Massachusetts, Connecticut y Rhode Island.
Oravec dijo el domingo que hasta ahora las nevadas en la región fueron relativamente ligeras debido a la mezcla de lluvia helada y aguanieve.
La nieve y las temperaturas árticas azotaron el sábado gran parte de la región centro-norte del país y las Grandes Llanuras, una extensa meseta que se extiende al este de las Montañas Rocosas. La nieve cubrió las carreteras en el este de Nebraska, el norte de Iowa y gran parte de Wisconsin. El Servicio Meteorológico Nacional emitió un aviso de clima invernal para partes de esos estados y Michigan, con hasta 10,6 centímetros de nieve pronosticados para Iowa, el sur de Wisconsin y la mayor parte de Michigan para la tarde del domingo.
Regresó el clima seco al sur de California después de la tormenta más fuerte del año el jueves, cuando una intensa lluvia provocó torrentes de agua y barro en los caminos, arrastrando un vehículo del Departamento de Bomberos de Los Ángeles fuera de la autopista Pacific Coast y lanzándolo al océano.
Sin embargo, el riesgo de deslizamientos de rocas y barro en laderas que fueron afectadas por la serie de incendios forestales de este año continúa desde el viernes, ya que los deslizamientos peligrosos pueden ocurrir incluso después que la lluvia haya mermado, particularmente en áreas quemadas donde la vegetación que ayuda a mantener el suelo anclado ha sido destruida.
Agua, escombros y rocas bajaron por la montaña en la ciudad de Sierra Madre el jueves por la noche, atrapando al menos un automóvil en el barro y dañando varios garajes de casas con barro y escombros. Las retroexcavadoras realizaron tareas de limpieza en las calles cubiertas de barro en la ciudad de 10.000 habitantes.
Al mismo tiempo, una tormenta en las montañas de Sierra Nevada dejó 1,8 metros de nieve en 36 horas. Dos miembros del equipo de patrullas de esquí de Mammoth Mountain quedaron atrapados en una avalancha durante trabajos de mitigación de avalanchas el viernes por la mañana, informó el complejo en una publicación de Facebook. Uno fue rescatado y estaba consciente, mientras que el otro fue trasladado a un hospital con heridas graves.
Fuertes tormentas también azotaron partes de Florida y Georgia, donde ya estaban vigentes las alertas de tornados la madrugada del domingo, según el Servicio Meteorológico Nacional.
En Atlanta, una persona murió cuando un “árbol extremadamente grande” cayó sobre una casa la madrugada del domingo, según informó el capitán del Cuerpo de Bomberos de Atlanta, Scott Powell. Dijo a los periodistas que los bomberos se dirigieron al lugar poco antes de las 5 de la mañana (hora local), después de una llamada al 911.
En Denver, donde se esperaba que las temperaturas bajaran hasta -10ºC durante el fin de semana, la ciudad abrió albergues para quienes viven en las calles.
Se esperan mayores acumulaciones de nieve en el norte del estado de Nueva York y otras partes de la costa este. En algunas áreas, las ráfagas de viento podrían alcanzar los 97 km/h y crear “condiciones peligrosas de nevadas”, advirtió el Servicio Meteorológico Nacional.
Agencias AP y AFP
