Conmoción internacional por el asesinato de una mujer oriunda de la localidad bonaerense de Mar del Plata en Inglaterra. Juliana Falcon -o Prosper, por su apellido de casada- fue encontrada este viernes gravemente herida junto a dos de sus hijos en su departamento en la ciudad de Luton, a 60 kilómetros de Londres. Hasta ahora, el único detenido y principal acusado por el hecho es otro de sus hijos, Nicholas Prosper, de 18 años.
La Capital de Mar del Plata indicó que la mujer de 48 años era oriunda de la ciudad costera y había asistido a la escuela primaria N°18, de Formosa e Independencia. Poco después de cumplir 20 años se mudó a Inglaterra, en donde conoció a Ray Prosper, quien se convirtió en su esposo y padre de sus cuatro hijos.
Además, en el medio local destacaron que tenía una gran “facilidad para los idiomas” que le permitió asimilar rápidamente la cultura británica y adaptarse a su nuevo hogar. Una de sus mejores amigas de la ciudad marplatense, Marina, relató: “Tenía una calidad humana increíble, una mujer súperinteligente y era una madre muy dedicada a sus hijos, por lo que no encuentro consuelo ni explicación a lo sucedido”.
Las otras dos víctimas, hijos de Falcon, fueron identificadas como Giselle, de 13, y Kyle, de 16. “En su tiempo libre, ‘Julie’ era una deportista entusiasta y disfrutaba recaudar dinero para obras de caridad, poniendo siempre a los demás primero. Kyle era un joven amable y divertido, que amaba el fútbol y el boxeo y sus amigos lo eran todo para él. Y Giselle… Un alma hermosa y una jovencita cariñosa, le gustaba reír mucho y amaba a su familia y a sus hermanos mayores”, coincidieron varias personas al ser consultadas por la prensa, según el medio marplatense.
Los tres fueron encontrados tras el aviso de los vecinos que escucharon ruidos de disparos durante la madrugada, según informó el portal local The Sun. Los oficiales de la policía de Bedforshire llegaron a la escena del crimen y encontraron a la madre y sus dos hijos “muy gravemente heridos”, que luego fueron declarados muertos por el personal médico.
A 600 metros del complejo de edificios en el que ocurrió el crimen, los efectivos policiales detuvieron al joven Nicholas Prosper y le secuestraron la escopeta que presuntamente habría utilizado para el triple asesinato. Además, al adolescente se le atribuyeron otros delitos, como compra sin certificado y posesión de armas blancas y de fuego.
En tanto, la cadena BBC señaló que Prosper declaró ante el Tribunal de la Corona de Luton desde la cárcel y fue acusado de asesinato. Quedó bajo custodia en una causa llevada por el juez Michael Simon y está previsto que el 5 de diciembre, ante el mismo tribunal, tenga una nueva audiencia para determinar su culpabilidad.
El resto de la familia estaba conformada por un hijo mayor, que no se encontraba en el departamento al momento del asesinato ya que vivía en otro departamento más cercano a su lugar de estudios.
Poco tiempo después de que se conociera la noticia comenzaron a llegar cientos de mensajes de condolencia para despedir a las tres víctimas. Los primeros fueron de los establecimientos educativos a los que asistían los dos menores, que utilizaron sus redes sociales para lamentar lo sucedido. “Estamos devastados por enterarnos de la muerte de uno de nuestros estudiantes, Kyle Prosper, en el trágico incidente en Marsh Farm”, escribieron en Facebook.
Por su parte, Lea Manor High School, la institución a la que asistía la menor de la familia, también utilizó sus redes sociales para referirse a lo sucedido. “Estamos shockeados por el trágico incidente que ocurrió este sábado en nuestra comunidad local y devastados por la pérdida de nuestra alumna Giselle Prosper. Era un alma hermosa y una alumna modelo, se destacaba en todas sus materias y será muy extrañada, especialmente por sus amigos del noveno grado”, publicaron en X.
LA NACION
