LONDRES.- Al día siguiente de protagonizar una inédita confrontación con Donald Trump en la Casa Blanca, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, se fue de Estados Unidos rumbo a Londres y dejó un extenso mensaje de agradecimiento para la Casa Blanca y los norteamericanos, además de expresar su esperanza por lograr unas “relaciones sólidas” con Washington.
En la muy tensa reunión en el Salón Oval -que fue registrada por cámaras de televisión y dio la vuelta al mundo-, el vicepresidente de Estados Unidos, JD Vance, acusó a Zelensky de faltarle el respeto a Trump al no agradecer la asistencia estadounidense. También el magnate lo tildó de desagradecido.
“Estamos muy agradecidos a Estados Unidos por todo el apoyo. Estoy agradecido al presidente Trump, al Congreso por su apoyo bipartidista y al pueblo estadounidense. Los ucranianos siempre han valorado este apoyo, especialmente durante estos tres años de invasión a gran escala”, comenzó Zelensky un extenso hilo de mensajes en su cuenta de X, después de la fallida reunión en la Casa Blanca, que se terminó abruptamente tras el choque.
Zelensky llegó a esa reunión dispuesto a firmar un acuerdo sobre mineral críticos con Estados Unidos, con la esperanza de conseguir garantías de seguridad para un eventual alto el fuego, pero salió con las manos vacías y con un gran problema diplomático, que quiso empezar a resolver con el mensaje de este sábado.
“La ayuda de Estados Unidos ha sido vital para ayudarnos a sobrevivir, y quiero reconocerlo. A pesar del duro diálogo, seguimos siendo socios estratégicos. Pero debemos ser honestos y directos entre nosotros para comprender verdaderamente nuestros objetivos compartidos”, continuó Zelensky. “Para nosotros es crucial contar con el apoyo del presidente Trump. Él quiere terminar la guerra, pero nadie desea la paz más que nosotros. Somos nosotros los que vivimos esta guerra en Ucrania. Es una lucha por nuestra libertad, por nuestra propia supervivencia”, agregó, después de que Trump afirmara que el presidente ucraniano no estaba listo para la paz.
“Queremos la paz -respondió, indirectamente, Zelensky-. Por eso vine a Estados Unidos y visité al presidente Trump. El acuerdo sobre los minerales es sólo un primer paso hacia las garantías de seguridad y hacia el acercamiento a la paz. Nuestra situación es difícil, pero no podemos dejar de luchar sin tener garantías de que Putin no volverá mañana”.
El presidente ucraniano admitió que hacer frente a la invasión rusa “será difícil sin el apoyo de Estados Unidos”, pero insistió en que necesitan garantías de seguridad: “Hemos visto cómo los rusos llegaron a nuestros hogares y mataron a mucha gente. Nadie quiere otra ola de ocupación. Si no podemos ser aceptados en la OTAN, necesitamos una estructura clara de garantías de seguridad de nuestros aliados en Estados Unidos”.
“Una vez que estas garantías estén en vigor, podemos hablar con Rusia, Europa y Estados Unidos”, agregó. “Todos los ucranianos quieren escuchar una postura firme de Estados Unidos de nuestro lado. Es comprensible que Estados Unidos busque el diálogo con Putin. Pero Estados Unidos siempre ha hablado de ‘paz a través de la fuerza’. Y juntos podemos tomar medidas firmes contra Putin”, dijo.
“Nuestra relación con el presidente estadounidense es más que la de dos líderes; es un vínculo histórico y sólido entre nuestros pueblos. Por eso siempre empiezo con palabras de gratitud de nuestra nación a la nación estadounidense”, señaló hacia el final y concluyó: “Estamos verdaderamente agradecidos. Solo queremos relaciones sólidas con Estados Unidos, y realmente espero que las tengamos”.
El encuentro frente a cámaras de Trump y Zelensky -previo a un almuerzo privado que se frustró- comenzó de forma bastante cordial e incluso el presidente estadounidense llegó a sugerir que mantendría algún tipo de asistencia militar a Ucrania hasta que pudiera asegurar un acuerdo de paz duradero con Rusia.
Pero cuando el mandatario ucraniano expresó su preocupación sobre confiar en cualquier promesa de Putin para poner fin a los combates, el vicepresidente JD Vance lo confrontó por mostrar su desacuerdo con Trump en público. Esto cambió de inmediato el tono de la conversación: Zelensky se puso a la defensiva y Trump y Vance lo tacharon de desagradecido e “irrespetuoso” y lanzaron contundentes advertencias sobre el futuro apoyo estadounidense. Trump incluso lo acusó de estar “jugando con la Tercera Guerra Mundial”.
Después del cruce, los principales asesores de Trump pidieron a Zelensky que abandonara la Casa Blanca, cancelando los planes para un almuerzo, una conferencia de prensa conjunta y la firma del acuerdo sobre minerales.
En una entrevista con la cadena Fox News más tarde, Zelensky no se disculpó con Trump, pero expresó su pesar por la reunión y su agradecimiento a Estados Unidos por su apoyo. “Estamos agradecidos y lamentamos esto”, dijo.
El presidente ucraniano reconoció que será “difícil” para Ucrania contener la invasión rusa sin la ayuda de Washington, pero se mostró esperanzado en poder reconducir la relación con Trump. Aunque insistió en que Ucrania no iniciará conversaciones de paz con el Kremlin hasta que tenga garantías de seguridad contra otra ofensiva.
Por su parte, el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, dijo en una entrevista con la cadena CNN que Zelensky debería disculparse “por habernos hecho perder el tiempo en una reunión que terminó de esta manera”.
Trump no cree que sea posible discutir garantías de seguridad para Ucrania hasta que se alcance un acuerdo de paz, agregó Rubio, quien estaba presente en el Salón Oval, pero no participó del acalorado intercambio. “Esto no significa que no se puedan estipular garantías en el marco de esa negociación, pero es necesario que haya un acuerdo. ¿Qué paz hay que garantizar si no se tiene primero un acuerdo de paz?”, dijo.
Tras su abrupta salida de la Casa Blanca, Zelensky llegó este sábado a Gran Bretaña, donde tiene previsto reunirse con el primer ministro británico, Keir Starmer, antes de una cumbre el domingo con una quincena de dirigentes europeos, que temen quedarse fuera de juego ante el acercamiento de Trump con Putin.
Los aliados europeos de Ucrania cerraron filas con Zelensky en masa apenas se conoció la pelea del Salón Oval, y el mandatario ucraniano les agradeció a cada uno de ellos por X.
En una conversación con Zelensky, Starmer -quien esta semana se reunió con Trump en Washington- le garantizó su “respaldo inquebrantable”.
Downing Street explicó que la cumbre londinense da “continuidad” a la celebrada en París a mediados de febrero y que se concentrará en “el refuerzo de la posición de Ucrania actualmente, incluido un respaldo militar continuo y una mayor presión económica sobre Rusia”.
Los participantes hablarán también de “la necesidad para Europa de desempeñar su papel en materia de defensa” ante el riesgo de retirada del paraguas militar y nuclear estadounidense.
El presidente francés, Emmanuel Macron -quien también viajó a Washington para intentar acercar posiciones entre Trump y Europa-, dijo estar dispuesto a “abrir la discusión” sobre una eventual futura disuasión nuclear europea tras una petición en este sentido del futuro jefe de gobierno alemán, Friedrich Merz.
El conservador, ganador de las recientes elecciones, cree que Europa debe prepararse para “el peor escenario” de una OTAN abandonada por Washington y quiere hablar sobre la posibilidad de que Francia y Reino Unido, con arsenal atómico, ofrezcan un paraguas “de seguridad nuclear” para el resto de socios.
La larga llamada entre Trump y Putin del 12 de febrero hizo saltar las alarmas en Ucrania y la Unión Europea, que no fueron invitados al lanzamiento de sus negociaciones bilaterales para poner fin a la guerra.
En Rusia, mientras tanto, acusaron este sábado a Zelensky de estar “obsesionado con proseguir la guerra” y celebraron la “lección de moral” que recibió por parte de Trump y Vance.
La visita a Washington fue “un completo fracaso político y diplomático del régimen de Kiev”, indicó la portavoz de la diplomacia rusa, María Zajarova, en un comunicado.
La funcionaria del gobierno de Putin acusó a Zelensky de ser “incapaz de demostrar sentido de la responsabilidad”, de “rechazar la paz” y de hacer uso de “mentiras y manipulaciones para justificar la continuación de las hostilidades y la recepción de la ayuda militar y financiera de Occidente”.
“Con su comportamiento excesivamente grosero durante su visita a Washington, Zelensky confirmó que es la amenaza más peligrosa para la comunidad internacional como belicista irresponsable”, afirmó Zajarova, y acusó a los dirigentes europeos de “debilidad política” y de “bajeza” por haber respaldado al líder ucraniano ante la “lección de moral” que recibió en Washington.
Agencias AP y AFP